El llamado “oro verde” o “fruta del corazón” del que se habla tanto en la actualidad por su creciente demanda y por sus magníficos valores nutricionales, es hoy día uno de nuestros productos estrella en Grupo La Caña, suponiendo un porcentaje bastante alto de nuestra producción total.
El aguacate, nuestro pequeño amigo con forma de pera y color verde intenso llegó a nuestra empresa hace más de 35 años, esto motiva que busquemos el testimonio de Ignacio Correa, uno de nuestros primeros agricultores en traer sus aguacates a nuestras instalaciones de Miguel García Sánchez.
Nos desplazamos a su finca ubicada en Puntalón, donde el cultivo de aguacate, en sus diferentes variedades, ha experimentado un crecimiento muy alto en los últimos diez años. Profesor de física en el Instituto de la Zafra de Motril durante más de media vida, y con 75 años recién cumplidos, Ignacio nos explica dónde nace su amor por la agricultura. “Mi andadura en el mundo de la agricultura empezó desde bien pequeño, ya que soy hijo de agricultores clavelistas”, siendo testigo de excepción de la llegada de las primeras fincas de la zona, “fuimos de los primeros en llegar a Puntalón, recuerdo que no existía ni el pueblo casi, y mi familia y yo nos dedicábamos al cultivo del almendro, que seguidamente en unos años los cambiamos por aguacates”.
Ignacio lleva más de 35 años vinculado a Grupo La Caña para la comercialización de sus aguacates y mangos. “Valoro la cercanía, la confianza y la seguridad en el pago. Aunque la empresa es cada vez más grande, te sientes muy bien acogido, y siempre que he tenido un problema me han echado una mano”. Además, asegura que los comerciales con los que ha tenido trato en estos años han sido formidables, “Pedro González, del que fui profesor, junto al asesoramiento de José López, quienes me han cogido el teléfono o han venido a verme cuando lo he necesitado, eso pone en valor la gran empresa en la que comercializo mis frutos”.
En su finca tiene cultivado aguacates de todas las variedades, aunque Ignacio nos comenta que, “la variedad hass es la mejor en cuanto a calidad-precio, pero bajo mi punto de vista y si la comercialización lo permite, la variedad reed es la más interesante, ya que el tamaño del árbol no es excesivamente grande, poliniza muy bien, y no es nada vecero”. Afortunadamente, las campañas han sido muy buenas, pero Ignacio es consciente de que el cultivo de aguacate demanda mucha agua y las lluvias son cada vez más escasas, “necesitamos el apoyo de todas las administraciones y el compromiso del gobierno para que se pueda financiar el proyecto de las canalizaciones de Rules, es de vital importancia poner solución al déficit de infraestructuras hidráulicas que tenemos en nuestra zona”.
En tostadas, ensaladas, pasteles, o aceites, el aguacate es un producto que está de moda y no es casualidad, gracias a las magnificas propiedades nutricionales que presenta, “es una fruta muy versátil que parece no tocar techo, puesto que cada vez hay más recetas y más cocineros hablando de él”. Poniendo en valor a los consumidores, que cada día lo demanda más, “el aguacate español siempre tendrá la ventaja de frescura y sabor, y por eso actualmente y tras la pandemia, los consumidores lo aprecian y están dispuestos a pagarlos”.