Condis, con 60 años de historia, es una de las empresas pioneras del sector de la alimentación en Cataluña, con un ámbito de actuación que también se extiende a la Comunidad de Madrid, Zona Centro y Andorra. Los hermanos Condal-Escudé inauguraron en 1980 su primer supermercado bajo la enseña Condal Alimentación y en 1992 nació la actual enseña Condis.
La compañía dispone de una red de más de 600 supermercados, una plantilla de profesionales y colaboradores superior a 5.000 personas y facturación de 800 millones de euros.
El carácter familiar, el valor de la cercanía con el consumidor gracias al modelo de negocio de supermercado de proximidad, son valores compartidos con Grupo La Caña, que se sustentan en una dilatada relación comercial.
Entrevistamos a Xavier Pérez, director de Marketing y Comunicación de Condis
- Condis es una referencia de compañía familiar en el sector de la distribución alimentaria, ¿Cuáles han sido las claves del desarrollo y consolidación en un sector tan exigente y cada día más competitivo?
Adaptarse a las nuevas estructuras familiares y sus necesidades incorporando las nuevas sensibilidades del consumidor en términos de sostenibilidad y responsabilidad a nuestro portafolio de productos y a las formas en que se los ofrecemos.
Por otro lado, no podemos olvidar la parte más importante de nuestro modelo de negocio, nuestras personas, que son las que fortalecen la conexión real con el consumidor. Es por ello que nuestros esfuerzos se basan en adaptar los objetivos de negocio a nuestros valores creando sinergia en una misma dirección.
- ¿Qué hace a Condis diferente con el resto de las cadenas de supermercados?
Condis apuesta por un modelo comercial multicanal que permite mantener mayor proximidad y conexión con las personas.
La multicanalidad se ve reflejada en nuestras enseñas con distintos formatos de proximidad, de conveniencia y de carga, así como con nuestro supermercado online, Condisline y nuestra APP Condis family que se adaptan en cada momento a las distintas necesidades de nuestros clientes. Estos servicios y el trato humano se complementan entre sí ofreciendo valores de proximidad, selección de productos, competitividad y conveniencia.
- Al inicio de la crisis del Covid19, decidieron abrir una hora antes para atender a las personas mayores, además de las adaptaciones en horarios ¿cómo han afrontado esta crisis? ¿en qué han cambiado los hábitos de compra?
En este último año nos hemos centrado en mejorar la seguridad de colaboradores y clientes y en garantizar el suministro durante las primeras semanas de pandemia. La cercanía con el consumidor y la seguridad en las tiendas han sido y son valores al alza, por lo que seguimos haciendo grandes esfuerzos en ese sentido.
Este último año y la situación excepcional vivida, ha reforzado aún más si cabe nuestra relación con el consumidor de proximidad y conveniencia y ha supuesto también un crecimiento significativo en la venta y la demanda on-line.
También nos ha brindado la oportunidad de incrementar y reforzar nuestra apuesta por productos de proximidad y de calidad, sobre todo en productos frescos aportando una mejora continua en sostenibilidad y medio ambiente.
- Han hecho una importante apuesta por la venta online, mucho antes de que este canal creciera exponencialmente por la pandemia, ¿Cuáles son sus proyectos futuros en este camino?
Actualmente estamos inmersos en un plan de ampliación de nuestra estructura logística con el objetivo de dar respuesta a toda la demanda que se genera a través de este canal, que se ha consolidado durante estos meses. Las nuevas instalaciones nos van a permitir trabajar de forma más eficiente e incrementar la capacidad de preparación.
El valor del trabajo coordinado entre supermercado y proveedor
Nos responde, Josep Llorens, Coordinador General de Compras-Ventas Frescos de Condis.
- ¿Qué papel juega el producto fresco como frutas y hortalizas en el supermercado de proximidad?
Lo que más nos enorgullece es la satisfacción de nuestros clientes al reforzar nuestra apuesta por la proximidad y, ante todo, por la calidad. Este último es el concepto que vamos a seguir desarrollando en el futuro, profundizando en aspectos como el sabor y la textura de los alimentos. Además, ahora el consumidor reclama productos con el máximo de propiedades saludables y sostenibles, pero sin renunciar a ninguna de las características mencionadas.
- ¿Lo estamos haciendo bien? Qué podemos destacar de la relación supermercado-comercializador en origen.
Sinceramente con el dialogo constante que mantenemos, creo que vamos por el buen camino, actualmente es muy importante acertar con la provisión al día del producto que se necesita, mantener la frescura en la exposición del producto, lo es todo, lo que en automoción se denomina just in time, y con este producto, el tomate de La Caña, lo estamos consiguiendo, si añadimos un buen packaging y selección del producto, podemos ser optimistas de cara al futuro.
- En Grupo La Caña hemos tenido siempre claro que debíamos mantener el nivel de calidad de nuestros productos, así como el sabor, ¿entiende el consumidor este valor?
Nuestra apuesta se decanta claramente por productos con valor añadido, a los que llamamos como “Gran calidad”. Nuestra aspiración es socializar las máximas calidades, sean estas higiénicas, de sabor, frescura, color, calibres, trato o información. Creemos en ofrecer productos de calidad a precios competitivos, para que todo el mundo pueda tener acceso. Nuestro mayor reto es encontrar la relación perfecta calidad/precio, para que nuestros clientes perciban que nos preocupamos por ellos y consigamos fidelizarlos
- Como proveedores en origen, ¿qué podemos mejorar en el trabajo coordinado con nuestros agricultores hacia la fidelización al consumidor?
Es muy importante que la selección por color, tamaño, madurez y trato del producto se lleven con el máximo rigor, cualquier incidente en alguno de estos aspectos, puede dar al traste con la imagen del producto, así mismo hay que seguir trabajando para que tanto el aspecto del envase, como del producto sea el más natural y sostenible posible, la percepción de un valor intangible alto es crucial, y la senda de trabajo que llevamos es, sin duda, la correcta.